Novedades Gas Gas TXT PRO 2006

18/01/2013
Trialworld

Gas Gas es la única marca que ofertó en 2006 dos modelos por encima del cuarto de litro, una opción única para poder elegir una respuesta de motor más personalizada aún para los pilotos. La Gas Gas TXT PRO 2006 se presenta con una extensa lista de novedades que buscan mejorar a su predecesora en todos los ámbitos, así que vamos a repasarlos.

En el apartado termodinámico, la gran preocupación de los técnicos ha sido el adaptarla a las nuevas normativas de homologación, para lo que se han introducido algunos cambios en el conjunto de escape, y también en sistema de refrigeración mediante la colocación de una nueva bomba con diferente perfil.

A nivel de encendido también se han introducido cambios, y el nuevo Kokusan cuenta con un dispositivo colocado junto al puño de acelerador, que permite elegir sobre la marcha entre dos mapas preinstalados de fábrica. Sin embargo, Gas Gas también equipa en algunas unidades el encendido Ducati, que no dispone de pulsador y sólo almacena un mapa, pero a cambio permite diseñar nuevas gráficas que podemos almacenar con la ayuda de una unidad de diagnosis.

Como colofón a una mecánica muy completa, encontramos unos nuevos discos de embrague de fricción realizados en otro material, con el que se consigue un mejor tacto y una mayor progresividad. Mecánicamente, la Pro 280 y 300 parten de un bloque motor prácticamente idéntico, del que tan sólo se diferencian en las medidas del cilindro y pistón, además de la culata y los parámetros de carburación.
La principal ventaja de esta “trescientos” es que su pistón es tan ligero como el de una 280, permitiendo así una subida de vueltas más rápida. Pero sin duda, donde más ha trabajado la marca gerundense es en mejorar la parte ciclo, que ya experimentó cambios importantes la pasada edición con la incorporación de una horquilla Marzocchi con barras de 40mm -38mm la anterior-.
Esta vez, y por primera vez en la historia, estas barras se han fabricado en aluminio, consiguiéndose una rebaja de peso cercana al kilo de peso únicamente en el tren delantero. Para completar esta preparación, tal como se podía esperar después de dos años colaborando con Öhlins para equipar la TXT Pro “Raga Edition”, la firma sueca se ha comprometido con la española para equipar sus amortiguadores en toda la gama “Pro” del presente año.

Por último en la lista de novedades encontramos otras de menor relevancia, como son la nueva palanca de arranque realizada en aluminio, la nueva instrumentación digital con tacómetro, o los nuevos anclajes de estriberas reforzados.

PRUEBA GAS GAS TXT PRO 2006 TRIAL

Antes de subirnos a la moto para comprobar su comportamiento dinámico, tenemos que analizar otra serie de parámetros. En primer lugar, su cilindrada. La extensa gama de motores que oferta Gas Gas, permite que cada cual pueda escoger la montura que mejor se adapte a su estilo de conducción, peso y finalidad de uso. Fue en el año 2000 cuando vio la luz el primer propulsor 280.
Su gran ventaja era ofrecer un término medio entre las sosas “dos y medio” de entonces, y los pesados propulsores con más de trescientos centímetros cúbicos. Desde entonces, los motores 280 se han convertido en todo un referente. Combinan a la perfección, la rapidez de los primeros, con la contundencia de los poderosos “trescientos”.
Una vez claras las premisas, nos ponemos manos al manillar de nuestra protagonista. A simple vista poco cambia, tan sólo los adhesivos y una nueva tonalidad más oscura en las barras de su horquilla la diferencian de su antecesora. Sin embargo, una vez en marcha todo es distinto. La llegada el pasado año del manillar sin barra, ya mejoró mucho el comportamiento de la moto, pasando a ser más cómoda y estable.
En esta edición, además, encontramos un tacto más suave de sus mandos, especialmente en el embrague. Recordemos que monta un embrague hidráulico de aceite. Este sistema se diferencia del tradicional, en que la bomba funciona con aceite mineral en vez de líquido de frenos. Se trata de una medida preventiva, con la que se evita la degradación de las juntas en el hipotético caso, de que por un problema, se mezclaran en líquido de frenos y el aceite del motor.

En cuanto al comportamiento del motor, la moto gerundese siempre se ha caracterizado por su contundencia. La respuesta al golpe de gas es muy rápida, pero a cambio necesita manos más expertas para sacarle todo su jugo. Una de las grandes bazas de esta mecánica frente a los de válvulas, sigue siendo su fantástica linealidad y estirada final, que complementado con un embrague muy directo, permite franquear casi cualquier obstáculo que imaginemos.
Además, este año han crecido sus posibilidades al montarse un interruptor en el manillar, que permite seleccionar sobre la marcha, entre los dos posibles mapas de su encendido Kokusan. El primero de ellos, ilustrado con un sol, ofrece una entrega de potencia más agresiva, pensada para aprovechar al máximo sus prestaciones. El segundo, programado como lluvia, busca mayor suavidad para lograr un pilotaje más efectivo sobre superficies resbaladizas.
Nosotros, probamos ambas configuraciones en distintos terrenos, además de someterlas a “la máquina de la verdad”, nuestro banco de potencia Dynojet. El veredicto, es que ambas son muy similares, tanto que apenas varían los datos y potencia, e incluso se igualan las cifras de par. Seguramente, la gran mayoría no aprecien las diferencias, pero sin embargo, es una gran idea de cara a futuras evoluciones y a dar un toque de exclusividad a la moto.
Pero donde está realmente la exclusividad, es en la parte ciclo. El nuevo reparto de pesos ha repercutido en una mayor agilidad general, acentuada por la liviandad de su horquilla. De antemano, pensábamos que una rebaja de un kilo en el tren delantero, podría repercutir negativamente en el aplomo del mismo. Sin embargo, los técnicos gerundenses han acertado en los reglajes, donde prima la suavidad y progresividad. Además ahora, la Pro es más sencilla de conducir con la rueda delantera en el aire, aportando mayor diversión y eficacia.

En lo referente al tren trasero, el nuevo Öhlins ha hecho ganar en estabilidad en conjunto, aunque su tarado sigue resultando algo duro para nuestro gusto, quizás por la falta de rodaje. En definitiva, la Pro 280 es una moto muy completa, capaz de ofrecer al usuario las sensaciones de toda una moto réplica de competición. Su gran inconveniente: no está exenta de pagar el correspondiente impuesto de matriculación.

RECAMBIOS GAS GAS DE TRIAL