La Beta Zero es una de las motos más carismáticas de la historia del Trial.
El modelo Zero vio la luz por primera vez en 1990, como consecuencia del desarrollo que Jordi Tarrés realizó sobre la Beta TR34, la cual evolucionó en 1989 a un prototipo de Beta Zero que se presentó en el Campeonato de España de Trial de Piedralaves (Ávila), y a pesar de que nunca se llegó a fabricar, despertó un gran interés en el sector por su imponente bastidor de doble viga de alumnio firmado por Verlicchi y el sistema de refrigeración líquida.
La Beta Zero nace en 1990 y su producción terminaría en 1993 con la Beta Zero Gara, que a su vez dio paso a la saga Beta Techno en 1994.
La Beta Zero equipó un motor de 2 tiempos y 260cc, aunque también había versiones de 240cc y 125cc. La Zero estaba alimentada por un carburador Mikuni de 26mm y una caja de cambios de seis velocidades.
Respecto a las suspensiones, la horquilla de la Beta Zero se confió a Paioli, que aportó una horquilla invertida con posibilidad de reglaje externo un recorrido de 175mm. Detrás, equipó un amortiguador Corte e Cosso. Los frenos eran de disco en ambos ejes y el peso final de la Beta Zero era de 79 kilos en seco. Respecto a la autonomía, la Beta Zero contaba con un depósito de combustible con capacidad para 3,8 litros, casi el doble que las motos de trial actuales.
La Beta Zero fue Campeona del Mundo de Trial con Jordi Tarrés en 1990 y 1991, mientras que en 1992 perdió el título a favor de Tommi Ahvala a los mandos de una Aprilia Climber.
BETA ZERO – EVOLUCIÓN DE LOS MODELOS
Beta Zero 1990 – Color rojo, primera serie
Beta Zero 1991 – Color negro y verde, segunda serie
Beta Zero 1992 – Color morado y amarillo, tercera serie
Beta Zero Gara 1993 – Color blanco, última serie